Por:
Oscar Medina
Orientador Educativo CIVE
La construcción del concepto de juventud ha fluctuado constantemente. Los orígenes de esta concepción son confusos y dependen mucho del contexto sociocultural desde el cuál se le mire. Sin embargo, queda claro que su importancia y reconocimiento va aumentando a cada momento.
No hace falta remontarnos tan lejos para darnos cuenta de esto, entre algunas de las clásicas historias familiares que he logrado escuchar, el abuelo cuenta como a diferencia de la generación de sus hijos con quienes compartían alimentos y opiniones, a él no se le permitía emitir juicio alguno cuando los adultos conversaban, en algunas ocasiones lo sacaban en conjunto con sus primos para que los mayores pudieran tener “pláticas de adultos”.
El reconocimiento de la voz de los jóvenes se hace cada vez más presente en los diversos ámbitos de la vida, con más frecuencia se toma en cuenta la opinión de niños y adolescentes para la toma de decisiones tanto a nivel familiar como a nivel sociedad.
Desde 1959 se genera la “Declaración de los Derechos del Niño” misma que da una base sólida para el posicionamiento de la juventud como un factor influyente en el desarrollo de nuestras comunidades expresando entre sus páginas: “la humanidad debe al niño lo mejor que puede ofrecerle”.
Es a partir de este momento que se da reconocimiento mundial a las generaciones más pequeñas con la finalidad de lograr construir un mundo diseñado para cada persona independientemente de su edad.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura en inglés, United Nations Educational, Scientific and Cultural Organization (UNESCO) ha declarado el 16 de agosto como el Día Internacional de la Juventud con la finalidad de involucrar a la juventud en los principales cambios geopolíticos que se trabajan en pro del bienestar humano, así como de las decisiones y estructuras que se integran dentro de las instituciones en las que se van desarrollando. Cada año se elige un tema en específico alrededor del cual se desarrollan comités de expertos que discuten los logros y metas que los países integrantes tenemos para lograr los ODS del 2030.
El tema a tratar este 16 de agosto del 2022 es: “La solidaridad intergeneracional: crear un mundo para todas las edades”.
Será importante tener en mente esta perspectiva y reflexionarla en nuestras practicas diarias, seamos docentes, administrativos o alumnos cada uno tendremos un papel para desarrollar.
Desde la perspectiva de la juventud será interesante escuchar las nuevas propuestas que se hagan para esta integración de ideas.
Es aquí donde nosotros entramos en el cambio, aunque tuviera que venir desde nuestros alumnos, nos corresponde fomentarlo dentro de los espacios que conforman nuestra comunidad, abrir espacios de diálogo y escucha que posibiliten a los alumnos desarrollas sus ideas y construir los futuros posibles que al día de hoy pueden parecerles solo un sueño.
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