Por Andrés Azamar

Esta semana se estrenó en Netflix la segunda temporada de esta serie británica. La serie sigue a dos personajes adolescentes, James y Alyssa, en su búsqueda de una vida mucho más real y tranquila que la que su familia de cada uno les ha dado.

En este intento, la primera temporada nos los presenta como dos personajes conflictivos y misántropos que encuentran en estas características una conexión particular. Es un viaje y una aventura caracterizada por una empatía extraña con los personajes.

La serie cuenta con un gran soundtrack y manifiesta muchos de los sentimientos de la generación adolescente actual.

The End of the F***ing World es una buena manera de pasar el fin de semana.